Tarta de galleta rellena

Tarta de galleta rellena

Atención amantes del chocolate!!!

Hoy os traigo una receta que os va a hacer enloquecer!!!

Tenemos cumpleaños a la vista. La más laminera de la casa es la que ha decidido qué pastel vamos a preparar. Le encantan las cookies, las chispas de chocolate y la Nocilla chorreante.

Es un gran dilema tener que elegir entre lo que te gusta mucho y lo que te encanta, jajajajaja. Que aprieto!!, Que trance!!, Que desesperación tan grande!! jajajajaja Vamos a dejar de sufrir por tonterías que no merece la pena.

Prepararemos una deliciosa masa de galletas, incluiremos trocitos de chocolate y la rellenaremos de Nocilla. Podemos tenerlo todo?? Siiiii. El resultado: Una galleta gigante rellena de Nocilla!!!

Conseguido!!! La tradición de celebrar que cumplimos un año más con un enorme pastel lleno de velas encendidas sigue intacta y mira que tiene unos añitos encima.

Para conocer el origen de los cumpleaños nos tenemos que remontar a los egipcios. Aproximadamente en el año 3000 a.C. esta tradición comenzó a ser conocida, aunque de manera muy diferente, ya que se oficiaba cuando se coronaba a un faraón y era entonces que empezaban a contar sus años de vida. El propósito era desearle a dicho faraón, prosperidad y bienestar, además de evitar que la muerte le pudiera robar el alma durante ese día.

Otras culturas cambiaron el propósito de esta celebración convirtiéndose en una especie de hechizo convocado para proteger de demonios y artes oscuras a quien cumplía años. Por eso encendían velas en su honor, para iluminarle y para alejar a lo oscuro y a lo maligno.

Los griegos creían en el “ángel de la guarda” al que llamaba daemon, y para rendirle culto, ponían sobre los altares del templo tortas redondas hechas con miel que tenían cirios encendidos. Ellos no las soplaban. Las velas debían consumirse por sí solas y cuanto más tardasen en apagarse más prosperidad tendría el cumpleañero.

Fueron los alemanes a partir del siglo XVIII, en una celebración llamada “Kinderfest” donde comenzaron a colocar en una tarta dos velas, una representando los años del niño y otra representando la «luz de la vida» para los años futuros. Las velas debían permanecer encendidas durante todo el día y se iban sustituyendo a medida que se apagaban, para que por la noche, el homenajeado pudiera pedir un deseo al soplarlas.

Es curioso cómo, sin darnos cuenta, continuamos viejas tradiciones que tienen su buena intención y su aquel. No sé si hoy en día somos conscientes de ello o sencillamente buscamos el momento adecuado para rodearnos de buena compañía, dejarnos llevar y disfrutar.

Tarta de galleta rellena

Los ingredientes que vamos a necesitar son:

350 gramos de harina una poca más para el molde
2 huevos
110 gramos de azúcar moreno
25 gramos de azúcar blanco
175 gramos de mantequilla sin sal blanda, no derretida y un poco más para el molde
120 gramos de nueces troceadas
140 gramos de chocolate negro picado fino + 60 gramos más
180 gramos de Nocilla
5 gramos de levadura química o polvo de hornear
1 cucharada de esencia de vainilla
Opcional: puedes ponerle una pizca de sal junto con el polvo de hornear

Elaboración:

Ponemos la mantequilla troceada en un bol y la batimos por 5 minutos.
Añadimos al bol el azúcar moreno y el blanco. Mezclamos y batimos otros 5 minutos.
Batimos un huevo y lo incorporamos a la mezcla sin dejar de batir. Cuando esté integrado, añadimos el segundo de igual manera.
Agregamos la esencia de vainilla y batimos. La masa parece que se ha cortado pero la harina hará que recupere su cremosidad.
Sobre el bol, tamizamos la levadura junto con la mitad de la harina y la integramos completamente con la espátula con movimientos envolventes.
Tamizamos la segunda mitad de la harina y hacemos el mismo proceso.
Incorporamos el chocolate y las nueces y mezclamos bien por toda la masa.
Pesamos la masa y la dividimos en dos partes (una será 1/3 de la masa y la otra 2/3).
Encendemos el horno a 180º con calor arriba y abajo.
Ponemos papel film dentro del molde y hacemos un círculo plano con el trozo pequeño de masa. Lo envolvemos en el plástico y lo llevamos a la nevera.
Engrasamos el molde, lo enharinamos y con los 2/3 de masa forramos el fondo y los laterales.
Extendemos la Nocilla sobre la masa y colocamos la tapa que habíamos guardado en el frigorífico. Presionamos un poco los bordes para que se unan las dos masas.
Llevamos el molde al horno durante 25 minutos.
Recién sacado del horno, añadimos chocolate troceado por encima y con el calor se derretirán.
Dejamos reposar en el molde unos 10 minutos.
Con la ayuda de dos espátulas lo sacamos del molde a una rejilla para que se temple.
Servimos la tarta templada acompañada de helado de vainilla bien frío.