Fideos Vermicelli con mejillones y tomates secos

Fideos Vermicelli con mejillones y tomates secos

Si nunca habéis visitado una feria de Oficios Perdidos os animo a hacerlo.

En mi pueblo se han celebrado varias coincidiendo con alguna festividad.

Gracias a la colaboración de los vecinos más mayores ataviados a la usanza, tienen los más jóvenes la suerte de comprobar in situ cómo se desempeñaban algunas tareas que han desaparecido en la actualidad y que de otra manera quedarían en el olvido.

En diferentes plazas y ensanches se muestran estas estampas de la vida diaria de hace unas décadas.

El alfarero modela el barro para convertirlo en botijos, rallos, barreños; el colchonero limpia y airea la lana para que quede más mullida; una cuadrilla peina y doma el esparto que se convertirá en cordeles, cuerdas y sogas; el carpintero talla con su maza cuencos, cubiertos, aperos, utensilios y juguetes.

Complicada la tarea de conservar el excedente de tomate en botellas de cristal a falta de otro recipiente mejor; el herrador prepara las nuevas calzas de su montura; que precisión la de ese soplador de vidrio que consigue, con la ayuda del fuego, domar el cristal y convertirlo en preciosas y delicadas figuras; cómodas y resistentes quedan las sillas cuando la anea está nueva; las cañas frágiles de la Huecha, ordenadas con esmero, se transforman en los cañizos que servirán de elemento de construcción en techumbres y apartaderos como el que separa el lugar donde se realiza el mondongo, el aprovechamiento de las carnes del cerdo en forma de morcillas o chorizos.

Que no falten las migas, el queso, los cántaros bien lustrosos con el agua de la fuente, el mostillo y las almendras garrapiñadas para obsequiar a los visitantes y público en general. Y cerrando el recorrido, en la última parada, fideos colgados en cañas a secar al aire para poder conservarlos por más tiempo.

Mi madre me cuenta que en su época no había tanta variedad de pasta como ahora. Nosotros tenemos que aprovechar esa ventaja y probarlos todos. Hoy Vermicelli, fideos de arroz que se usan sobre todo para prepara platos a base de marisco.

Fideos Vermicelli con mejillones y tomates secos

Los ingredientes que vamos a necesitar son:

350 gramos de fideos finos de arroz
2 kilos de mejillones de roca (también puedes comprarlos enlatados al natural)
Aceite de oliva virgen extra
Salsa de tomate
Sal
Pimienta negra de molinillo
Un botecito de tomates secos en aceite y unos pocos más para decorar
Albahaca fresca
2 ajos

Elaboración:

Duchamos los mejillones con agua del grifo y los removemos para retirar los rotos o abiertos.
Cortamos las barbas con unas tijeras y frotamos las cáscaras con un estropajo de metal para retirar toda la suciedad pegada.
Volvemos a pasarlos por agua para limpiar los restos pero sin sumergirlos.
Los ponemos en una olla grande tapada, a fuego medio para que se vayan abriendo poco a poco.
Los sacamos a un plato y les quitamos la cáscara.
Conservamos el caldo colado.
Picamos los ajos y trituramos los tomates con su aceite.
En una sartén grande, ponemos un poco de aceite y freímos los ajos.
Añadimos los tomates triturados, 2 cucharadas de salsa de tomate y 3 cazos del caldo de los mejillones.
Incorporamos también los mejillones, pimienta al gusto y sal.
Ponemos una olla grande a hervir con agua y abundante sal.
Cuando esté caliente el agua, apagamos el fuego, introducimos los fideos y los dejamos reposar 3 minutos.
Los escurrimos, los incorporamos a la salsa y mezclamos.
Agregamos las hojas de albahaca y algunos trocitos de tomates secos para decorar.