Estofado de pavo

Estofado de pavo

Estoy segura de que pocas veces tienes en cuenta la carne de pavo a la hora de preparar el menú semanal.

Cuando hacemos la planificación no nos acordamos del pavo para nada, es así, nos pasa a todos, no nos resulta atractivo porque nos faltan recetas como esta.

En cambio, en Navidad si, en Navidad es el «rey» o por lo menos lo ha sido durante mucho tiempo en mi casa.

Cuando yo era pequeña vivía en mi pueblo en una casa grande de las de antes, con muchas habitaciones, muchas escaleras, muchos trastos y un enorme corral en la parte de atrás.

Allí teníamos gallinas, conejos, palomas y de vez en cuando algún cerdo, todos para consumo propio. Teníamos maíz y cereales y siempre había restos de verduras del huerto, así que, nos salía a cuenta criarlos en casa. Siempre estábamos bien surtidos.

Con el tiempo, había que sustituir a las gallinas más viejas porque ya no producían más de lo que comían. Era cuestión de hacer cálculos, tanto trigo, tantos huevos, si el resultado no era positivo, se destinaban a enriquecer alguna sopa y poco más.

Así que, de vez en cuando, venía una furgoneta ambulante a vender pollitos y mi madre siempre compraba algunos para criarlos y al poco tiempo ya volvíamos a tener suministro de huevos.

También compraba un par de pavitos que eran monísimos y que nos comíamos cuando estaban grandotes en Navidad.

Durante esas fiestas teníamos un menú fijo y bastante sencillo a base de cardo y pavo. Para cenar «Cardo con salsa de almendras», «Pechuga de pavo al horno con puré de manzana» y «Ensalada de cardo rizado». Al día siguiente para comer «Caldo de carne», «Redondo de pavo en salsa de verduras y frutos secos» y otra vez «Ensalada de cardo rizado».

Los días posteriores, mi madre guisaba los muslos y hacía croquetas y apaños hasta que se iba gastando y cuando se terminaba pues hasta el año siguiente. Así durante muchos años, tantos que se convirtió en costumbre.

De un tiempo a esta parte esa costumbre se ha ido modificando, combinando lo tradicional con los nuevos gustos y preferencias.

La verdad es que no me importa porque ahora podemos encontrar este tipo de carne cada día en el mercado y preparar cuando nos apetezca este guisito tan rico.

Estofado de pavo

Los ingredientes que vamos a necesitar son:

1 kilo de carne de pavo para estofado cortado en trozos de bocado
4 zanahorias grandes
4 patatas medianas
Aceite de oliva virgen extra
Sal
2 cucharadas de perejil seco
1 cebolla
1 o dos cucharadas de tomate frito
100 mililitros de vino blanco seco
1/2 litro de agua
Pimienta negra en polvo

Elaboración:

Pelamos las patatas y las cortamos en cuadraditos. Pelamos las zanahorias y las cortamos en rodajas finas. Pelamos y picamos la cebolla.
Preparamos una olla amplia para el estofado con dos dedos de agua para que se vaya calentando a fuego medio.
Salpimentamos el pavo.
En una sartén ponemos aceite y freímos la carne. Cuando haya cambiado de color la pasamos a la olla con todo el jugo que ha desprendido en el cocinado para que se vaya cociendo tapado.
En la misma sartén, ponemos un poco de aceite y añadimos las zanahorias a freír con un poco de sal y el perejil. Cuando estén tiernas las escurrimos y las añadimos a la olla en la que se está cociendo la carne.
Incorporamos la cebolla a la sartén para hacer el sofrito y cuando empiece a dorarse, añadimos el tomate frito. Mezclamos bien y volcamos sobre la olla.
Agregamos el vino y dejamos la olla abierta un par de minutos para que se evapore el alcohol. Tapamos de nuevo.
Limpiamos bien la sartén y ponemos aceite limpio para freír las patatas con un poco de sal. Cuando estén fritas las agregamos a la olla también.
Espolvoreamos con perejil.
Tapamos y cocemos todos los ingredientes juntos 2 o 3 minutos más para que se mezclen los sabores.